Tipos de quemaduras y cómo tratarlas

A lo largo de tu vida, es probable que hayas sufrido algún tipo de quemadura. Aunque son comunes, estas lesiones pueden variar en gravedad y consecuencias. Por eso, es importante conocer los tipos de quemaduras y cómo actuar ante una situación de emergencia.

Cada año unas 180.000 personas mueren como consecuencia de quemaduras, según la Organización Mundial de la Salud. Esta cifra ya es impactante. Pero también lo es saber que aquellas quemaduras que no resultan en la muerte de la víctima son la causa de muchas enfermedades y discapacidades.

En España, cada año se registran unos 1.300 ingresos hospitalarios por quemaduras, según un informe de la Fundación MAPFRE. Pueden parecer accidentes aislados, pero esto equivale a entre 3 y 4 casos de quemaduras al día.

La mayoría de los accidentes por quemaduras se producen en casa o en el trabajo. Por ese motivo, te vamos a explicar cuáles son los tipos de quemaduras y cómo puedes actuar ante una situación como esta.

¿Qué es una quemadura?

Las quemaduras son lesiones que se producen en la piel u otros tejidos del cuerpo. Esta es la definición más técnica. Pero al final, todos lo conocemos como el daño en la piel como consecuencia del contacto con algún objeto muy caliente o muy frío.

Aunque también se pueden producir quemaduras por el sol, la electricidad o el contacto con sustancias químicas.

Clasificación de quemaduras

Si lees la definición, tal vez pienses que es poco probable que sufras una quemadura grave y ojalá sea así. Pero como más vale prevenir que curar, vamos a ver qué tipos de quemaduras existen para saber cómo actuar en cada caso.

Quemaduras de primer grado

Este es el primero de los tipos de quemaduras y es el de gravedad más leve. Se trata de quemaduras superficiales que sólo afectan a la capa externa de la piel, conocida como epidermis.

Estas quemaduras son dolorosas porque no dejan de ser una lesión en los tejidos. Sin embargo, no suelen presentar riesgos serios para nuestra salud.

Estos tipos de quemaduras presentan estas características:

• La piel se enrojece y presenta algo de hinchazón.
• El dolor dura entre 48 y 72 horas, pero desaparece.
• La piel se vuelve blanca al hacer presión sobre ella.

Una exposición al sol prolongada o una explosión breve de calor pueden causar estos tipos de quemaduras.

Quemaduras de segundo grado

Las quemaduras de segundo grado son lesiones de mayor gravedad que la anterior. En este caso, el daño no sólo afecta a la capa externa de la piel, sino que traspasa la capa que hay debajo, conocida como dermis.

A diferencia de los tipos de quemaduras anteriores, las de segundo grado tardan varias semanas en curarse.

Las quemaduras de segundo grado tienen estas características:

• Verás que la piel está roja, hinchada y es brillante.
• Estos tipos de quemaduras son muy dolorosas y pueden requerir medicamentos para el dolor.
• Aparecen ampollas como muestra de que la lesión ha afectado a la piel en mayor profundidad.

Las causas de estos tipos de quemaduras van desde el contacto con agua hirviendo o llamas hasta electricidad o productos químicos.

Quemaduras de tercer grado

Estas lesiones son los tipos de quemaduras más graves, ya que afectan a todas las capas de la piel: la epidermis, la dermis y la hipodermis. Además, pueden llegar incluso a afectar a los músculos, los tendones y los huesos.

Puede que esto te sorprenda, pero al contrario de lo que mucha gente piensa, en estos tipos de quemaduras, el área afectada no es dolorosa. Esto se debe a que la lesión afecta a las terminaciones nerviosas de la piel.

No obstante, esto no significa que no se sienta dolor, ya que el área que rodea a la quemadura sí es dolorosa. Estas lesiones cutáneas se caracterizan por:

• El aspecto de la piel cambia a un color negro, marrón o amarillo.
• La textura de la piel ya no es húmeda como en el caso anterior, sino seca.
• La zona quemada de la piel se inflama.

Las causas de estos tipos de quemaduras son similares a las anteriores, pero llevadas a un extremo mucho más grave. Como es evidente, la recuperación en este tipo de lesiones es mucho más lenta y puede dejar marcas de por vida.

¿Cómo actuar ante una quemadura?

Si alguna vez te encuentras en un accidente donde alguna v, lo primero que debes hacer es mantener la calma.

Al prestar primeros auxilios en una emergencia por quemaduras, es muy importante seguir ciertos pasos para minimizar el daño y ayudar en lo posible a que la víctima se recupere lo antes posible.

• Ponte a salvo: aléjate del objeto o las llamas que te han causado la lesión.
• Enfría la zona afectada con abundante agua a temperatura ambiente durante, al menos, unos 10 minutos. Esto te ayudará a reducir la inflamación.
• No toques nunca ni las ampollas ni la piel muerta y, sobre todo, jamás retires la ropa que está pegada a la piel.
• No apliques aceites, cremas o remedios caseros en las quemaduras graves. Aunque tu intención sea buena, puedes empeorar la situación causando infecciones.
• Acude a un centro médico. Allí el personal médico y de enfermería te atenderá y tratará las quemaduras y sus posibles complicaciones.

Como hemos visto, existen distintos tipos de quemaduras y eso implica que hay distintos tipos de tratamientos. Si no eres experto, lo mejor es que te pongas en manos de profesionales. De lo contrario, podrías agravar las lesiones.

Por ejemplo, no se recomienda vendar las quemaduras de primer grado porque puede provocar riesgo de infección. Cada lesión es distinta y requiere unos cuidados distintos. Por eso, acude al centro médico y que los expertos te guíen para garantizar una pronta recuperación.