Volver a estudiar a los 40

A los 40 años, son muchas las personas que se plantean volver a estudiar para mejorar sus oportunidades laborales o cambiar de rumbo profesional. Existen distintas opciones: Formación Profesional, universidad, másteres y otras especializaciones.

Este artículo explica las diferentes alternativas formativas para personas adultas, qué perfil puede beneficiarse de cada una, las modalidades de estudio disponibles y cómo organizarse para compaginar estudios y trabajo.

Qué puedes estudiar si tienes más de 40

La formación a partir de los 40 años ofrece distintas opciones que se ajustan a las necesidades y a la formación previa de cada persona. Existen alternativas para todos los perfiles:

• Educación Secundaria para personas adultas (ESA)
• Formación Profesional (FP)
• Estudios universitarios
• Másteres y especializaciones

ESO para adultos

Esta opción permite a personas mayores de 18 años obtener el título de graduado en Educación Secundaria Obligatoria (ESO). Por tanto, es ideal para quienes buscan conseguir una formación básica para acceder a otros estudios o mejorar sus opciones laborales. 

Con esta titulación, se puede optar a oposiciones y acceder a ciclos formativos de Grado Medio. Además, abre la puerta a muchos empleos en sectores como administración, comercio y atención al público, donde el título de ESO suele ser un requisito mínimo imprescindible.

Consulta cómo sacarse la ESO para adultos en este artículo.

FP

Los ciclos de Formación Profesional (FP) son las enseñanzas más prácticas del sistema educativo. Estos estudios preparan para profesiones concretas y facilitan la incorporación al mercado laboral. 

Esta alternativa es perfecta para quienes buscan reorientar su carrera o cambiar de sector profesional. Existe una gran variedad de Grados Medios y Superiores en áreas como sanidad, informática, comercio o industria. 

Además, ayuda a crear una red de contactos profesionales para encontrar nuevas oportunidades laborales en otro sector. 

Para conocer todos los requisitos de acceso a FP, consulta este post.

Carreras universitarias

Los grados universitarios son programas de estudios superiores en distintos campos profesionales. Estas enseñanzas se recomiendan, sobre todo, para aquellas personas que aspiran a ocupar puestos de mayor responsabilidad. 

Los estudios universitarios permiten obtener un título de Grado. Estas titulaciones abren las puertas a empleos de mayor cualificación y ofrecen formación en distintos campos profesionales.

Másteres y especializaciones

Son programas pensados para actualizar y profundizar en conocimientos y habilidades. Por tanto, se recomiendan a quienes quieren mejorar su empleabilidad y acceder a puestos de trabajo especializados y con mejores condiciones laborales. 

Existen másteres universitarios para quienes ya tienen una carrera y másteres de FP para personas con un título de Grado Superior.

Consulta qué máster puedes hacer después de un Grado Superior en este post.

Modalidades de estudio para personas adultas

Existen diferentes modalidades de estudio que se adaptan a las necesidades de cada persona.

• Presencial: Es la modalidad tradicional, consiste en asistir a clases de forma regular en un centro o universidad. Suelen ofrecer horarios adaptados, como turno de tarde o noche para quien lo necesite. Es la opción ideal para quienes valoran el contacto directo con el profesorado y el grupo.
• Semipresencial: Combina clases presenciales con trabajo autónomo y actividades online. Permite realizar parte de la formación a distancia y acudir al centro solo en momentos concretos, como prácticas, tutorías o exámenes.
• A distancia: Las clases, tutorías y evaluación se desarrolla a través de plataformas digitales. Es la modalidad más flexible porque permite compaginar los estudios con las responsabilidades laborales o familiares. En algunos casos, solo es necesario acudir al centro para hacer los exámenes finales. 

Cómo organizarse para estudiar y trabajar a la vez 

Compaginar trabajo y estudios puede resultar complicado, pero con una buena organización es posible lograrlo. Para ello hay que: 

• Planificar el tiempo de manera realista: Elaborar un horario semanal que incluya las horas destinadas al trabajo y al estudio. Es fundamental ser realista sobre el tiempo disponible y reservar espacios para el descanso, ya que el bienestar influye en el rendimiento.
• Priorizar de tareas: Identificar las actividades más urgentes e importantes en ambos ámbitos, laboral y académico. Esta priorización ayuda a gestionar mejor el tiempo y a reducir la sensación de saturación.
• Aprovechar momentos libres: Utilizar pausas en el trabajo o desplazamientos para repasar apuntes o avanzar en tareas. Aprovechar estos pequeños espacios contribuye a mantener el ritmo de estudio.
• Elegir opciones flexibles: Optar, en la medida de lo posible, por estudios online o a tiempo parcial. Asimismo, buscar empleos con horarios flexibles facilita la conciliación entre trabajo y formación.
• Usar herramientas digitales de organización: Aplicaciones como Google Calendar, Notion, Todoist, Trello, myHomework Student Planner o MyStudyLife ayudan a gestionar tareas, horarios y recordatorios para evitar olvidar entregas y organizarse mejor. 

Dónde estudiar

En España, hay más de 90 universidades y 4.549 centros autorizados para impartir Formación Profesional (FP). Esto significa que hay opciones para todos los perfiles y en todas las comunidades autónomas.

Muchas personas adultas, con responsabilidades familiares o laborales, encuentran en la formación a distancia la forma más práctica de seguir estudiando. Esta modalidad permite organizar el tiempo de estudio con más flexibilidad y compaginarlo con el trabajo o la vida personal.

En el ámbito universitario, la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED) ofrece una amplia variedad de grados y másteres online. 

En Formación Profesional, centros como iLERNA destacan por su metodología y un acompañamiento personalizado. Cuentan con más de 30 ciclos formativos online, distribuidos en 8 familias profesionales distintas.

Esto permite a las personas adultas formarse en sectores con alta demanda y, al mismo tiempo, mantener un equilibrio con sus responsabilidades.